“Si enseñamos a los niños a aceptar la diversidad como algo normal, no será necesario hablar de inclusión sino de convivencia”.
Daniel Comín, de Autismo Diario
Todo padre o madre de un niñx con autismo se ha preguntado alguna vez por qué a su hijo/a le tratan de manera diferente, por qué le dejan solo, por qué no recibe las ayudas necesarias… La respuesta a todas ellas, por desgracia, suele ser por INDIFERENCIA, pero sobre todo por DESCONOCIMIENTO.
Cuando en el colegio un niñx se rompía la pierna, ¿por qué no le dejaban bajar al patio con el resto de compañeros? ¿por qué le dejaban solo? Esta situación, como muchas otras, podría servir para fomentar la cooperación y el compañerismo entre iguales. En cambio, se tiende a todo lo contrario; se le aísla del resto de compañeros y actividades, perdiendo de esta manera preciosas oportunidades de fortalecer lazos de unión con ellos y trabajar la convivencia de una manera natural. Lamentablemente, muchas veces ocurre lo mismo con el autismo.
¿Cuáles son las claves a la hora de educar en estos valores?
TOLERANCIA
“Ser tolerante es aceptar y permitir las circunstancias o diferencias de los demás, es respetar, comprender y admitir la diferencia o la diversidad.”
¿Cómo inculcar en tus hijos esta cualidad tan positiva? Dando ejemplo, pues todos aprendemos por observación y es la mejor herramienta para que los niños y las niñas sean capaces de desarrollarla. A continuación, te dejo algunas ideas de cómo hacerlo o aprovechar ciertas situaciones:
- A través de cuentos, vídeos e historias
- A través de los juegos y la convivencia
- Aceptando y respetando las diferencias de cada uno
- Compartiendo, sin pelear
- Escuchando y aprendiendo a ser más flexibles
CONCIENCIACIÓN
Lo primero sería reducir o eliminar el desconocimiento o las creencias erróneas que hay sobre este trastorno del desarrollo, especialmente en los adultos. Y, en segundo lugar, enseñar diferentes maneras de poder ayudar e involucrarse.
Muchas veces, son los padres y las madres de niñxs de desarrollo típico los que provocan inconscientemente este aislamiento del niñx con autismo. Les falta empatía para poder cambiar los mensajes que transmiten a sus hijos (“no te juntes con ese que es raro”, “a ese niñx no le invites a tu cumpleaños que muerde”…) por otros del tipo (“puedes ayudarle que necesita más apoyo”, “¿Qué te parece acercarte e intentar jugar con él?”…).
APOYO A FAMILIAS
Y por supuesto, el apoyo a familias con hijos de desarrollo no típico es imprescindible para conseguir una sociedad mejor, en la que todos seamos aceptados y valorados, y sepamos apreciar y aprender de las diferentes capacidades de cada uno.
Patricia Cuevas. Equipo de Evolutea
